S E M I N A R I O del Área de Biofísica y Ciencia de Materiales. (svaldez-arroba-fis.unam.mx)

Enrique García Hernández

Depto. Química de Macromoléculas/IQ-UNAM

 

 

Tradicionalmente, a los carbohidratos se les atribuía importancia biológica actuando como monosacáridos libres para proveer energía química o bien como polisacáridos participando como elementos estructurales o sistemas de almacenamiento de energía. A mediados de los 90’s, quedó firmemente esclarecido un nuevo tipo de función para los carbohidratos. En forma de oligosacáridos, se distinguen por una gran capacidad para codificar información estereoquímica, por lo que durante la evolución biológica se especializaron como etiquetas de identidad celular en cualquier tipo de organismo vivo. Este “código azucarado” es descodificado por las lectinas, un grupo amplio y estructuralmente diverso de proteínas que se especializaron para ofrecer superficies complementarias donde las moléculas de carbohidrato pueden unirse de manera no covalente y con un alto grado de especificidad. Una amplia variedad de procesos relacionados con el reconocimiento y la comunicación celular toman ventaja del código azucarado. La fertilización, la regulación de la conectividad tisular, el desarrollo neuronal, la respuesta inmune y la infección patogénica son tan sólo algunos procesos cuyo desarrollo apropiado depende de manera crucial del reconocimiento entre lectinas y carbohidratos.

Aunque de manera conceptual es relativamente simple describir las interacciones involucradas en la asociación no covalente lectina-carbohidrato (L-C), la forma en que éstas se conjugan para dictar la estabilidad global es muy compleja. Esta complejidad ha hecho prohibitivo el análisis con métodos ab initio, por lo que se ha optado por la construcción de modelos empíricos lo suficientemente simples como para ser computacionalmente asequibles y que a su vez sean física y químicamente realistas. En los últimos años, hemos venido desarrollando una línea de investigación sobre las bases moleculares del reconocimiento L-C. El objetivo principal ha sido la elaboración de un marco cuantitativo que permita relacionar la energética con cambios estructurales que acompañan a la reacción. Los modelos moleculares que hemos resuelto han mostrado su utilidad para hacer estimados de la energética de asociación L-C, en tanto que ha sido posible exponer propiedades estereoquímicas y energéticas clave de este tipo de heterocomplejos. A su vez, estos modelos han probado su utilidad en el análisis de otros tipos de complejos proteína-carbohidrato, sugiriendo una aplicación más general de los mismos.

S E M I N A R I O   del   Área de Biofísica y Ciencia de Materiales. (svaldez-arroba-fis.unam.mx)

www.fis.unam.mx/seminarios_BiofCienciaMateriales.php

Participante: Dr. Enrique García Hernández. IQ-UNAM

Institución: "¡¡RECONOCIMIENTO PROTEÍNA-CARBOHIDRATO: UNA RELACIÓN DULCE E INTENSA!!"

Lugar: Auditorio ICF

Fecha y hora: Este evento terminó el Martes, 18 de Octubre de 2011